Una de las principales misiones que tiene un fotógrafo es plasmar la realidad no solo como es, sino con un halo de perfección, de belleza distinta. La visión del fotógrafo normalmente también aparece en las fotografías, porque incluso en las que se toman con puro realismo, es el profesional el que elige el encuadre y el momento de la captura. Enaltecer lo hermoso, ocultar cualquier imperfección, puede ser también una de esas misiones cuando estamos, por ejemplo, retratando a personas. Si nuestro trabajo va a tener un largo recorrido comercial y vamos a aparecer en revistas, portadas y demás, los retoques son casi imprescindibles. Es algo a lo que ya nos hemos acostumbrado y para bien o para mal, el ojo del cliente ya está entrenado para detectar el más mínimo fallo. Por eso, cuando se trata de fotografiar desnudos, el reto es aun mayor porque estamos ante algo tan hermoso como un cuerpo humano.
Los fotógrafos especializados en desnudos suelen ser hombres, aunque también hay cada vez más mujeres. Esto tiene una explicación sencilla, y es que para la mayoría de sesiones de desnudo, el público al que aluden esas fotos es masculino. La visión de un fotógrafo varón sobre el cuerpo de la mujer siempre estará mejor valorada de cara a la propia publicidad y al marketing. Sin embargo, un fotógrafo no debe dejarse llevar por sus instintos morbosos, porque eso le haría un mal profesional. Estamos hablando de sesiones en las que las modelos están desnudas y deben sentirse cómodas. Lo último que una chica quiere es desnudarse delante de un tipo que está haciéndole fotos empalmado. Debemos mantener la compostura y pensar, en todo momento, en lo que la sesión requiere. Utilizar bien la luz, conseguir que la modelo se sienta a gusto para que pose con más naturalidad… Las sesiones de desnudo se suelen realizar para revistas o publicaciones, pero también para los books de las chicas. Hay una opción muy interesante dentro de este nicho de mercado, y es realizar sesiones para trabajadoras sexuales que necesitan de esas fotos para su oficio.
La necesidad de unas buenas fotografías
El negocio del sexo de pago es tan antiguo como la propia Humanidad, y lo más sorprendente es que sigue gozando de una gran salud, a pesar de todo. Muchos países lo han prohibido, en otros las chicas son simplemente marginadas y señaladas… pero siempre hay demanda de sexo de pago. Por eso siempre habrá chicas dispuestas a entregarse al placer y disfrutar de un oficio como este, sacrificado pero también divertido y excitante en muchas ocasiones. Y para conseguirlo necesitan sobresalir sobre las demás. Internet ha cambiado las reglas del juego en los últimos tiempos, y ahora las escorts han pasado de hacer la calle a presentarse en anuncios para adultos. En la red puedes encontrar muchas páginas sobre ellos, con perfiles de cada chica, sus datos, su información relevante… y unas buenas fotos, a ser posible, muy profesionales.
Lo que buscan las escorts
Las chicas que trabajan en este negocio necesitan un buen book fotográfico para llamar la atención de los clientes. Al fin y al cabo, una prostituta vive de su cuerpo, de su imagen y su belleza. Y es mucho más fácil convencer a un posible cliente con fotos sugerentes e incluso explícitas, que hacerlo como antes, con los anuncios por palabras. Es por ello que ahora, la mayoría de amantes profesionales buscan a fotógrafos para que les realicen esas sesiones, al más puro estilo Playboy. Algunas siguen haciéndolo por su cuenta, con fotos con el móvil, pero la calidad de estas imágenes es mucho menor y la diferencia es abismal. Lo que busca una escort es tener un book espectacular donde salga preciosa, sensual y muy provocativa.
Como pasa en cualquier trabajo, cada cliente es un mundo, y por eso aquí también cada chica tendrá sus propias ideas y necesidades. Sin embargo, si te das un paseo por las fotos de los perfiles que ya están en la red, notarás que hay muchos puntos en común. Por ejemplo, aparecen con ropa muy ajustada, lencería sexy o directamente desnudas. Esto dependerá de la chica y del tipo de fotos que necesite, claro está. También es habitual posar en posturas poco ortodoxas, pero que hacen destacar los atributos de las chicas, especialmente el trasero. El objetivo al final es llamar la atención, porque entre tantos perfiles distintos, una buena foto puede ser lo que te haga ganar un cliente, y estas chicas lo saben muy bien.
Consejos para unas fotos perfectas
Si quieres realizar una sesión de fotos perfecta para una de estas chicas debes tener en cuenta varios factores. El primero ya lo comentábamos arriba, ser respetuoso al máximo, acogedor y sobre todo, dar espacio a la chica para que ella se sienta cómoda. Este tipo de profesionales están acostumbradas a que las vean desnudas, así que no se van a ruborizar ni nada de eso, pero es cierto que un ambiente tóxico puede echar a perder toda la sesión. Debes preguntarle a la chica qué tipo de fotos busca, si quiere una sesión más sensual y sugerente o prefiere algo mucho más explícito, con desnudo integral e incluso planos de sus genitales… Según lo que te diga, podrás trabajar de una forma o de otra, con unos encuadres, con una luz distinta.
Está bien ponerse creativo en este tipo de sesiones, pero debes ceñirte siempre a la visión que la chica te pida. Al fin y al cabo esto no deja de ser un encargo, y la clienta es ella. La iluminación es como siempre un punto imprescindible para que las fotos salgan perfectas. Cambiar el ambiente de las fotos le dará también más dinamismo a la sesión, para que no sean todas exactamente iguales. Después de la sesión tocará retocarlas un poco, especialmente en el tema del rostro. Hay muchas chicas que no quieren que se les vea la cara, así que tendrás que pixelarla o censurarla de alguna forma. El resto de retoques deben ser simplemente para perfeccionar algunas zonas. Si la cliente te pide algo más de pecho, cambiar el color de ojos… ya estará en tu mano aceptar o no.
Un interesante nicho de trabajo
Los fotógrafos siempre están buscando nuevos nichos de mercado donde trabajar, donde poder expandir sus servicios y acceder a nuevos clientes. Y particularmente, esto de las sesiones a escorts nos parece uno de los mejores negocios que podríamos encontrar. Cuando logremos que una de estas chicas quede satisfecha con nuestro trabajo, nuestra fama se expandirá por sus compañeras. Ellas verán nuestras fotos y querrán unas iguales. Y como decíamos arriba, el sector del sexo todavía goza de muy buena salud, y cuenta con un montón de escorts, especialmente en las ciudades más importantes. Aprovechar ese nicho puede ser interesante para conseguir mucho más trabajo fijo y continuado, porque además las chicas deben cambiar su book cada cierto tiempo, de cara a tener fotos recientes.